Para terminar nuestro periplo en Huahine el último día decidimos hacer lo que los anteriores, ir a la playa comer en casa y tranquilidad antes de ir al aeropuerto para coger el vuelo a Raiatea.
Otro vuelo de 20 minutos y llegamos a Raiatea. No llovía pero el cielo estaba bastante negro. Como no, en el aeropuerto todo carteles para la gente que iba a los hoteles y nosotros directamente pasando de largo para ir a hacer dedo a la carretera. La verdad es que tuvimos suerte y nos cogieron prácticamente a la primera.
Llegamos a la pensión a la que se supone que teníamos reserva y nos encontramos que no hay nadie y la recepción está vacía. Esperamos un rato y preguntamos a la vecina y en vista de que no aparecía le llamamos. La señora nos dijo que venía en un rato y a los 10 minutos apareció. Nos dijo que se le había olvidado ya que habíamos hecho la reserva hace 3 semanas pero que no había problema.
La pensión se supone que estaba bien (era el our pick de la lonely planet) y tenía incluso piscina. Pero la realidad era otra y la señora no era muy amiga de la escoba ni el recogedor. Lo bueno era que teníamos otra vez un dormitorio para nosotros solos.
No hay mucho más que contar de Raiatea la verdad, ya que los dos siguientes días estuvo lloviendo sin parar. Lo único que hicimos fue estar en la terraza del hostal (eso sí estaba bastante bien), e ir al pueblo a dar una vuelta y al súper. El pueblo no tiene nada. El tercer día por la mañana mejoró el tiempo y dimos una vuelta por la isla en bici, con un par de repechos que hicieron que Susana sudara la gota gorda.
No hemos tenido suerte con esta isla por el tiempo, pero la verdad es que no tiene ninguna playa y salvo hacer algún tour por la laguna no sé si merece la pena teniendo en cuenta lo bonitas que son las demás islas…
Siguiente parada Maupiti. El aeropuerto es una broma. Un techo con una pared, así que está todo al aire libre. No hay ni una sola barrera, así que no hay ningún tipo de seguridad de que alguien cruce la pista etc. Además el aeropuerto está en un motu (isla) y tiene playa. De hecho los hoteles te vienen a buscar en bote directamente al aeropuerto y te esperan junto a la pista.
Maupiti es una isla súper bonita. Se dice que es igual que Bora Bora pero en pequeña y menos turística. De hecho en esta isla no hay ningún hotel en plan resort. Todo son pensiones tanto en la isla principal como en los motus. El color del agua de la laguna es alucinante, posiblemente el más bonito que hemos visto.
Por una vez decidimos estirarnos y nos fuimos a una pensión a un motu y con media pensión. Todo el mundo nos había dicho que se comía bien, y no era mentira. La señora cocinaba muy bien y en cantidades industriales, así que el par de días que hemos estado en esta isla hemos comido como reyes pescado crudo, brochetas, pollo, carne, ensaladas…
Lo malo ha sido el tiempo. No nos ha hecho tan malo como en Raitea donde no dejaba de llover, pero todos los días ha estado lloviendo a ratos. Pero eso no nos ha impedido pasar algunos ratos tirados en la playa, pegarnos algunos chombos, dar un par de paseos por la isla y hacer una inmersión con mantas.
En la pensión éramos 6, una pareja de italianos mayorcitos que estaban indignados con Berlusconi con los que nos reímos un rato y que llevaban ya unas cuantas vueltas al mundo y una pareja de un Suizo y una colombiana con los que también coincidimos en Bora Bora en la playa un par de días.
Una pasada la inmersión. En una zona muy poco profunda (unos 8 metros) hay una especie de coral bastante grande donde van las mantas (es una estación de limpieza donde peces las limpian). Allí fuimos y había 4 mantas. Nos fuimos acercando poco a poco y acabamos de rodillas en el fondo y estuvimos viendo como las mantas se movía y pasaban junto a nosotros o por encima. Son bichos bastante grandes (unos 3,5m) y son como pájaros gigantes dentro del agua.
Última parada Bora Bora. Una vez más, conseguimos contactar con una chica francesa (Cecile) que vive en Bora Bora que decidió hospedarnos a través de couchsurfing. Cecile nos dijo que ella no iba a dormir en casa las 3 noches que estaríamos, así que nos dejó las llaves y el apartamento para nosotros en Vaitape (principal pueblo de Bora Bora).
Bora Bora se nota que es más turístico. El avión iba lleno y se oyen diferentes idiomas entre los guiris. Hasta BoraBora el 95% de los turistas que nos hemos encontrado eran gabachos, pero aquí se ve de todo. La gente no sale mucho de los hoteles, así que si quieres ir a tomar algo toca ir a un hotel. Cecile nos dijo que si nos apetecía ir a tomar algo y nos llevó al Sofitel. Un hotel muy bonito y donde nos tomamos un coctel que nos gustó mucho aunque nos dolió un poco a la cartera, pero bueno, un día es un día.
En cuanto a planes, lo principal que hemos hecho ha sido dar una vuelta entera a la isla en bici (32 km casi llanos) en los que puedes ver las diferentes islas que rodean a la isla principal y las montañas, realmente bonitas y bastantes hoteles abandonados.
El tema del turismo aquí no debe ir demasiado bien, salvo los grandes hoteles de grandes cadenas. Además, por lo que a nosotros nos parece aquí no trabaja ni tarzán. Los tíos son más vagos que la chaqueta de un guardia. Dando la vuelta a la isla vimos a familias enteras un lunes jugando a la petanca a las 11 de la mañana. Eso sí, aquí lo importante es tener un coche 4x4 lo más grande posible (para hacer un máximo de 32km) y tener dinero para cervezas. De hecho cuando vas por la carretera y ves un coche pequeño ya sabes automáticamente que es de un gabachito y no de un tahitiano. Es un misterio de dónde saca el dinero esta gente porque la cerveza aquí es bastante cara y los coches también. Según nos contaron la gente pide un préstamo para el coche aunque luego su casa se caiga a cachos. Tampoco sabemos si es el hecho de que no trabajen o es simplemente genética pero aquí la gente está por lo general bastante obesa. La imagen de mujer tahitiana de los panfletos de las agencias de viajes no sé si es de una modelo extranjera, porque aquí hemos visto a 2 mujeres delgadas y 3 hombres delgados. Eso sí, la gente por lo general es maja y tienes que ir saludando todo el día porque todo el mundo te saluda.
En cuanto a las playas, playas, realmente salvo en los motus sólo hay una que valga la pena que está en el sur y en la que hemos pasado unos cuantos ratos…es una playa chulísima...
Ah, y también hemos buceado. Una vez habíamos visto mantas, estábamos decididos a ver tiburones, pero esta vez pudiendo verlos un rato (en la gran barrera fueron escasos segundos). Así que hicimos 2 buceos. En el primero era en el que se supone que íbamos a ver tiburones, y tan que fue así. Nada más entrar en el agua, en la superficie Susana ya vio un par de tiburones. Fuimos bajando y había un montón de tiburones, los de cola negra, que no son muy grandes, sobre 1 metro. Estuvimos un buen rato disfrutando de la vista cuando de repente aparecen a nuestra izquierda los tiburones limón? (lemmon shark) que ya sí que tienen un tamaño respetable (2,5m). Allí nos quedamos abobados mirándolos hasta que uno se giró y empezó a venir hacía nosotros. De hecho pasó justo por debajo nuestro…un poco de acojono nos entró, pero una pasada. En el segundo buceo vimos un montón de rayas dando vueltas y como volando dentro del agua. El agua de ambas inmersiones de un color azul que parece de mentira.
Después playa y cena con Cecile y su vecina, que nos hizo atún rojo crudo con leche de coco y vegetales..muy bueno.
El último día en Polinesia Francesa lo pasamos entre Papeete (que no tiene nada) y el aeropuerto, esperando unas cuantas horas hasta que salga nuestro vuelo a Isla de Pascua. Da un poco de pena dejar Polinesia por que las playas y el mar son los más bonitos que hemos visto pero también nos alegra llegar a Sudamérica y poder hablar en castellano y dejar de dar patadas al diccionario de francés.
Por cierto, ya están las fotos de Polinesia colgadas también.
Aupa Vividores,
ResponderEliminarSomos Anita y Ion. Vemos que seguís gorroneando al máximo.
Por aquí todo bien. Ion: Nos dicen que tienes una fotocopia ( Todo el mundo nos dice que Ander es igual que tú). Físicamente sí se parece, pero lo que no saben es que de carácter también. (está todo el tiempo bajo las faldas de su madre, como tú cuando eras pequeño...)
Viendo en lo que te has convertido, ya estamos temblando...
Por otra parte, mañana entraremos en UEFA. Bueno quizás no..
Disfrutad y pasadlo a tope.
Recuerdos de Gorka el del Lorea.
El momento tiburón acercándose tuvo que ser divertido ;-)
ResponderEliminarAhora a disfrutar del castellano. Ya os vais acercando en huso horario al nuestro y ya sabéis qué quiere decir eso.
Por fin los GP hacéis una aparición, se me han salido las lágrimas... espero que Ander no salga con las dotos de Ion de basket por que si no su padre va a tener que llorar...
ResponderEliminarLlega Sudamérica y creo que falta un mes para el encuentro Brasil! Me imagino que no llegaréis negros, así que espero no sentirme muy fuera de lugar!
Por aquí Djoko vuelve a ganar a Nadal, esta vez en Roma, después de verle perder tb contra Djoko en Madrid en vivo y Roland Garros se acerca con cuatro finales perdidas consecutivas ante Djoko... como comprenderéis ayer estuve llorando, pero hoy estoy con energías renovadas...
la despedida la cuento en otro foro, y el Athletic no pasó del empate...
pues eso, a ver si la conectividad mejora, echaré un vistazo esta semana a las fotos que ho Lunes hay que empezar a currar...
un abrazo champs y bienvenidos al imperio de emilio donde nunca cae el sol...
Como vivís, truhanes!!
ResponderEliminarEspero que la etapa americana empieza tan bien como ha sido esta última, y con mejor tiempo. Imagino que lo que os toca ahora será más cansado y no una sucesión de playas paradisíacas.
Por aquí todo sin novedades, os pondré un correo esta semana y os cuento de la despedida etc.
Como yo no sigo los deportes, no añado nada que no haya dicho mi predecesor en este forillo. Espero, en efecto, que vuestro paso por nuestras antiguas posesiones sea todo un éxito!
Un abrazo,
Emilio