Para llegar a Isla Cozumel hay que coger un bote en Playa del Carmen, que es como Benidorm pero con el mar turquesa, asi que ni paramos. Nuestra sorpresa al llegar a Cozumel fue ver un Hard Rock café en frente del puerto y los precios de los restaurantes en UD Dollars… La mayoría de los vuelos que llegan a Cozumel son desde Estados Unidos, así que está requeteamericanozado!
Cozumel es bastante grande, y para moverse hay que coger una moto o bici, pero nosotros estuvimos vagos hasta para eso y nos dimos una vuelta por las playas locales, que son bastante cutres como playas, pero el mar es de un azul increíble. Además nuestro principal motivo para ir a Cozumel era bucear, y eso hicimos. El arrecife de allí es uno de los más famosos del mundo porque son los que aparecían siempre en los documentales de Jaques Cousteau. Y la verdad es que son muy bonitos, y como el agua es super transparente el color del coral se ve muy muy chulo.
De Cozumel, vuelta a Cancún para recoger a Amaia y al día siguiente, nos fuimos a Isla Mujeres, a seguir pasando calor, y es que hemos pasado un calor de muerte. En isla mujeres cogimos unas bicis y nos pusimos a recorrer la isla, pero la cosa es que no tiene muchas playas y las pocas que hay tienes que pagar para entrar en el “beach club”. Nosotros nos paramos a recuperar fuerzas en un bar y el chico del bar nos dijo un caminito para no pagar, ya que la playa es pública y lo que pagas es por el acceso. Una vez que nos habíamos colado en la playa, pues ya nos tiramos en las tumbonas y todo, como si hubiéramos pagado (la verdad es que la entrada eran 3 euros) El snorkel en esa zona también es muy chulo, especialmente para Amaia y Ion que se metieron en una zona protegida y estuvieron nadando con bancos enormes de peces. Yo me conformé con ver una raya y un montón de pececillos.
Y ya para rematar el moreno, nos fuimos a Tulum, que tiene una playa impresionante y tranquila, aunque con el agua más revuelta que en las islas y por tanto menos transparente. Sólo pasamos un par de días en Tulum, pero super completos porque fuimos a ver las ruinas, a la playa, a bucear y a otra playa cercana a hacer snorkel con tortugas.
El buceo de Tulum ha sido uno de los más impresionantes que hemos hecho, porque han sido nuestras primeras inmersiones en un cenote (y probablemente las ultimas por mucho tiempo). El cenote al que fuimos es el Cenote Dos Ojos, que tiene un agua azul transparente impresionante. El buceo es como por cuevas que conectan los cenotes y es increíble. La visibilidad es superior a 100m y si no fuera porque ves las burbujas de aire salir parece como que estas flotando en el espacio, es lo más cercano a la falta de ingravidez que hemos experimentado. Además en algunos momentos del buceo apagas la linterna y te quedas totalmente a oscuras y también se ve la luz entrar por algunas zonas creando unos colores increíbles…estuvimos todo el día como si saliésemos de un sueño.
Estos no somos nosotros, la hemos sacado del instructor de buceo |
Y para completar el día nos fuimos a una playa muy chula que hay a unos 25km y en la que hay tortugas viviendo ahí, así que nos metimos al agua en busca de tortugas y después de casi una hora de ver pececillos, vimos un montón de tortugas… no se porque no se nos ocurrió primero ir a aquella zona que es donde estaban todos los tours, pero en cuento llegamos vimos hasta 8 tortugas.
Tulum fue nuestra última parada en México, de ahí cogimos un bus hasta Chetumal que está en la frontera con Belize, y desde ahí una lancha rápida a Cayo Cualker.
Cayo Caulker es lo que yo esperaría de Jamaica, casa al lado del mar pintadas de diferentes colores, rastas medio borrachos y mar turquesa. Sólo pasamos un día en Cayo Caulker y lo dedicamos a hacer un tour de snorkel, el mejor snorkel que hemos hecho en nuestra vida. El tour tenía 3 paradas, en la primer nadamos con manatíes, en la segunda con tiburones nodriza (creo que nurse sharks son tiburones nodriza) y rayas, y en la tercera en un coral muy chulo con miles de peces, algunos de ellos casi de 1 metro y hasta una morena verde muy chula. El paseo en barco también fue muy agradable, así que el día estuvo muy bien.
Y luego rumbo a Guatemala, donde estamos ahora y nos hemos encontrado de nuevo con Anu, Raja y Yannick, la familia india con la que viajamos en Bolivia, así que ahora somos 6 viajando juntos.
El próximo post, a ver si engañamos a Amaia para que escriba, pero no estoy muy segura de conseguirlo.